R2: ¡Con esto me conformo!

Si las universidades pusieran un sello en los artículos que corresponden exactamente a la “verdad”, por un lado necesitaríamos fe ciega en la autoridad de esa universidad que son instituciones de producción de conocimiento, pero como todas las instituciones están conformadas por personas, como usted o yo.

Por otro lado los protocolos para el ingreso de material teórico a los archivos o bases de datos requerirían un tiempo prolongado, lo cual se traduciría en un desfasaje entre el conocimiento y la actualidad de ese conocimiento. Muchas veces la “academia” demora en autorizar producciones novedosas y en muchos campos los cambios son tan recientes que no existe conocimiento “legitimado” sino en proceso de construcción y debate. Otras tantas los programas llegan hasta tal o cual período histórico por “falta de distancia suficiente” para abordarlo. Esto hace que los conocimientos que se adquieran en las universidades no estén del todo actualizados.

Que un artículo tenga fecha pretérita o de hoy no garantiza la calidad de la información. En realidad no hay nada que garantice la exactitud de la información. Es falaz considerar que no hay cambios, transformaciones, nuevas miradas o análisis de hechos y/o acontecimientos.

Es nuestro bagaje, nuestros deseos de búsqueda, así como nuestra capacidad de discernimiento y nuestra confianza en lo que sabemos y la confianza en quienes nos han enseñado la mejor base para considerar que información es pertinente y cuál no lo es. Existen diferentes “GPS”, nunca está demás preguntar por otros posibles caminos o rutas a otros “GPS” de confianza.